viernes, 26 de julio de 2013
26 de julio, una fecha dos momentos. Un 26 de julio de 1952, con un ultimo suspiro, la compañera Evita sostenida en la lucha de un pueblo, ascendía al panteón de la eternidad en la memoria del pueblo trabajador Argentino. Un 26 de julio de 1953, exactamente un año después, desde el fracaso del asalto al cuartel Moncada en Santiago de Cuba, Fidel Castro comenzaba el largo camino por la liberación y la dignidad del pueblo cubano.
Una fecha, dos pueblos, la misma lucha. Ambos fueron, son y serán por siempre atacados y denostados por los intereses oligarcas e imperialistas, por aquellos que viven sobre el sufrimiento del pueblo, aquellos que sustentan sus privilegios en la pobreza, la explotación. y la humillación.
Sus palabras y ejemplos de lucha siguen vigentes y seguirán por siempre como banderas al frente de las luchas populares
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