viernes, 28 de agosto de 2015

BARRILETE 1974 (quinta entrega)

viernes, 28 de agosto de 2015
 
 
PENITENCIA
 
 
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
No debo tocar el culo al general
 
Roberto Santoro
 
POESIA MILITANTE
 
Hoy
el poema
comienza
cuando sale a la calle.
Ya no
sirve
hacer bellos poemas
que esperen
a sus clientes
cómodamente echados,
a la manera
de las prostitutas de lujo.
La historia
sólo amará a aquellos
que porten su poesía
como un estandarte
de combate
y avancen
con el vertiginoso
paso del pueblo.
 
Carlos Patiño
 
A UNA GUITARRA
 
                                                   a la salud del
                                                       General Sánchez
 
Raya la mañana
un encordado de disparos.
Precisa guitarra preparada
para el sonido justiciero,
bordona cuidadosa
en fabricar los tajos
que hachan la vida del torturador.
 
Guitarra de la emboscada,
en la embestida furiosa
de tus ruedas,
cómo podía zafarse,
cómo podía levantar un vuelo
de fuga el buitre
tantas veces esperado
en la encerrona
de tus cuerdas!
 
Guitarra de los coches,
obturando el del paso
mientras se amartilla el pulso,
 guitarra perseguidora
en el orden del disparo,
labrando la  linterna victoriosa,
hundiendo hasta aquietar
todo resto de vida,
la navaja instantánea del balazo.
 
Ya es la muerte
amuecando la boca del generalito,
guitarra del combatiente,
cómo mueves tus ojos
salpicando pólvora,
cómo pueblas la calle
con tus rasguidos de acero,
hasta que nazca
de tu canto el alba.
 
Enrique Courau



jueves, 27 de agosto de 2015

REVISTA BARRILETE (cuarta parte)

jueves, 27 de agosto de 2015

Siné
CRUENTA Y PROLONGADA
 
Supongo que no habrá divergencias
que estarán todos de acuerdo
en que hubiera sido lindo
muy lindo ver
al Hospital de Niños en el Sheraton Hotel
no se dio. Y entonces las "coherentes explicaciones"
"las reales caracterizaciones correctas de la coyuntura"
y entonces... las pelotas
porque a veces es suficiente creer
mirar alrededor y sentirse millones
pensar que no se puede engañar eternamente al pueblo
gritar con furia que ya llegó el día
de darle leña a la puta oligarquía
y sentir que es cierto
que esta vez nos toca a nosotros
por eso es necesario ir a Ezeiza y festejar
y entonces sí: los vemos en el palco
sentimos el olor que siempre tiene la traición
vivimos nuevamente el dolor de Trelew
Desde entonces y hasta aquí el asombro
el masca despacio la bronca
perder batalla por batalla
cicatrizar por dentro lentamente
alimentando con estoicismo nuestra seguridad
porque sabemos que sí
que aunque lleguemos pocos y nos duela
vamos a hacer la patria peronista
vamos a hacerla montonera y socialista.
 
Alberto Costa
 
POR LA VUELTA
 
Volvemos a encontrarnos.
Nunca estuvimos lejos,
una forma distinta de estar solos.
Buenos Aires fue nuestra
por derecho de andarla,
de sufrirla,
de dolernos su gente, sus años de silencio
y la sangre que a golpes
salpicaba la urgencia de los diarios.
Cada uno en lo suyo
aguantaba la fe de que cambiara
la suerte en contra
en la ciudad querida.
En algunos duraba la amistad.
Pero aun perdidos los demás en el trabajo,
en los hijos,
en el amor, abiertos los ojos al destino;
otros enardeciendo su derecho de estar,
gritando abajo
los códigos del odio,
era encontrarnos
y subir el abrazo y la alegría
y el recuerdo a la voz que nos juntaba.
 
Ahora estamos de nuevo, casi todos.
Hemos vuelto otra vez,
por la palabra
 
Rafael Vásquez
 
 
(la imagen y los poemas forman parte del sobre Barrilete publicado en 1974 bajo la dirección de Roberto Santoro, Carlos Patiño y Alberto Costa; último ejemplar de la revista, en cuyo interior se encontraban poemas e ilustraciones en papeles sueltos de distintos tamaños y colores)
 


miércoles, 26 de agosto de 2015

REVISTA BARRILETE 1974 (tercera parte)

miércoles, 26 de agosto de 2015
 
 
LOS TESTIGOS

Este barrio
pelea diariamente con su pulmón de sangre todavía,
reflota a cada hora de su asfixia dramática
y se pone las fechas y los nombres de un tiempo
y sus apodos
de los que aún existen y de los que se fueron
con las rotas macetas del viejo conventillo
que sostiene el capricho de esta hoja
la voz empecinada de su voz incoherente
tocándome mi nombre
chocándome el olvido.
Porque hoy, acaso sin saber retrocedí y llegué
pero no lo encontré con esa puerta rota del baldío de Gómez
donde Kuky y el Chinche se robaban el futbol por la tarde.
Desde Ecuador y el arco del almacén sin vidrios
hasta el sonido roto de Yan Yoré y la esquina
transité todo un tiempo de veredas informes
y crecí hasta Raúl que esperaba unos años más arriba
porque la vida acerca cuando sube
cuando va igualitaria por la misma esperanza
cuando encima los años y el parecido rastro
de haber mirado un día la vidriera violenta de la infancia
desde el lado de afuera del juguete con cuerda.

Hay barrios donde todos los hijos se parecen
tienen mucho de ajeno en su reloj sin hora.
Sólo la navidad ilusiona al año como un chiste  de dios
conde la vida acierta pocas veces.

Hay barrios donde todos los hijos se parecen
llevan la misma mancha de identidad en los ojos
porque hay un mismo asombro en su principio
porque salen enteros a gastar su domingo
aunque la adolescencia los despierte temprano
y los vista con ropas de aprendiz a deshora.

 El mejor de nosotros, no le pudo sumar
veranos a este invierno
uno más uno es siempre quien nació en un momento
de heredadas bufandas
y a pesar del siniestro crecido en medianeras
del sálvese quien pueda de la ciudad que empuja
con sus puños armados
no le dimos más tiempo que el tiempo necesario
de la sombra de un día a este gigante.
Asi es que el tiempo tuvo que ver con todos ellos
y también con nosotros cuando fuimos dispersos.

-Me quedó en la rutina el arribo a la sombra
de Antonio con sus hijos-

y hoy no sé en qué rincón
seguramente adultos
los acucie la noche y se ganen la espera con las manos tendidas

Hay barrios donde todos los hijos se parecen.
Cierto que se parecen un poco a sus hermanos
de modo que ya es hora que el otoño se cargue las hojas
un buen día
y decida esperar, sin arrastrar tanto
solo, solo,
su turno.

José Antonio Cedrón

 

(la imagen y los poemas forman parte del sobre Barrilete publicado en 1974 bajo la dirección de Roberto Santoro, Carlos Patiño y Alberto Costa; último ejemplar de la revista, en cuyo interior se encontraban poemas e ilustraciones en papeles sueltos de distintos tamaños y colores)

martes, 25 de agosto de 2015

REVISTA BARRILETE 1974 (segunda parte)

martes, 25 de agosto de 2015

 
A LA LEY DEL JUEGO...
 
A la ley del juego todo está dicho
Falta envido truco y si hay flor
Contra flor al resto!
El resto de la flor? el resto de la esperanza..?
Es necesario golpear la mesa
La mancha de ginebra se limpia con un brazo azul
Esos ojos no eran los del bien y del mal
10 estrellas en el cielo 10
En el patio abierto todavía están las cartas
Y el amor la mujer cansada que cuenta las cuentas del amor
Acaricié su frente espanté mi muerte que acechaba su sueño
Soplabas muerte en el patio con tus cartas abiertas...?
Entregabas la partida...?
La partida vino a buscarnos diría Francisco nos sorprendió
asesinos y torturadores
mala caño
La mujer que uno ama los compañeros
Te escondes amor? retrocedes?
Te silencias vida? retrocedes?
Espantados pájaros de la noche pájaros negros uñas negras crecidas crecidas...
Toda la muerte a una sola mano?
Habrá desquite?
Habrá partidas de cartas en el cielo?
habrá cielos?
 
Vicente Zito Lema
 
¿Y SI SI?
 
¿Y si si?
 
¿Y si entre tanto Lenín,
conyuntura,
y organismo de base,
y compañero;
 
si entre tanta vigilia y Antidühring,
entre tanto plenario y cigarrillo,
se nos está infiltrando la ternura
como un disimulado agente de la CIA?
 
¿Y si apoyo la moción
quiere decir
sos linda?
 
¿Y si yo estoy de acuerdo en el planteo
quiere decir
qué bárbaros tus ojos?
 
¿Y si me adhiero
quiere decir sencillamente
que me adhiero?
 
Ojo compañerita,
vigilancia,
que el enemigo acecha.
 
Analicemos el asunto
a nivel autocrítico.
 
Pero un poco más cerca.
Mirándonos los ojos
interminablemente,
si es posible.
 
Humberto Costantini
 
NUMERO PAR
 
Chapotea por mi sangre
el iluminado
se eleva en un canto oscuro y brillante
navega por mi cara
el miserable que me da la vida
boga sin remos por mi laguna interior
el innombrable
el que me dio el miedo
mi dios renacido
el ángel de lámpara negra
el muerto que velo, antipoema.
 
Felipe Reisin
 
(la imagen y los poemas forman parte del sobre Barrilete publicado en 1974 bajo la dirección de Roberto Santoro, Carlos Patiño y Alberto Costa; último ejemplar de la revista, en cuyo interior se encontraban poemas e ilustraciones en papeles sueltos de distintos tamaños y colores)


lunes, 24 de agosto de 2015

REVISTA BARRILETE 1974 (primera parte)

lunes, 24 de agosto de 2015


CALLE DE TIERRA
 
El automóvil negro camina su etiqueta

el lujo ha comenzado, se inicia la miseria.
 
La esquina tiene mocos y las rodillas negras
un viento agujereado y las baldosas muertas.
 
El automóvil corre porque anda sobre ruedas,
los señores de nafta son señores de seda.
 
La esquina humildemente se humilla ante sus puertas:
tres tenedores rotos, veinte chicos de tierra.
 
El automóvil crece hasta las chimeneas,
lo señores del auto por señores se elevan.
 
Cuando todo ha pasado se asoman caras secas
y ternuras con mocos y rodillas sin ruedas.
 
Carlos Enrique Urquía
 
SITUACIÓN
 
¿Qué puedo hacer aquí
cuando nadie
se reconoce en mis ropas
cuando nadie habita mis gestos
oprimidos?
 
¿Qué puedo hacer
yo que hablo en el idioma de todos
para ser dueño de lo que todos dicen?
 
Sólo en la máscara de mi plato
el mundo se conmueve
 
Alberto Luis Ponzo
 
LA LOCA BAIRES
 
Quién la vio reina del plata,
y quién la ve ahora pura ruina,
con los pulmones afuera, perdida,
miserable trepada a las luces del centro;
agitada como nunca,
colosal de loca, de chiflada,
a los gritos clamando toda la bronca,
dice malditos cosacos mosqueteros traidores dice,
 
postergadores, hijos de un vagón de putas dice,
ministros bandoleros ratas tratantes dice,
señoras limpitas venerables canallas dice,
y solitos, muñecos del apuro, abdicadores,
aturdidos, viudos del amor,
amputados lisiados de la ternura dice,
vaciados,
tontitos,
y se agita y se mece
con su gorro frigio la piantada,
con esas ramas y esas hojas,
como un bouquet de tormentas entre los brazos
 
los laureles que supo conseguir
 
Marcos Silber
 
(la ilustración y los poemas forman parte del sobre Barrilete publicado en 1974 bajo la dirección de Roberto Santoro, Carlos Patiño y Alberto Costa.;ultimo ejemplar de la revista, en cuyo interior se encontraban poemas e ilustraciones en papeles sueltos de distintos tamaños y colores)
 
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